miércoles, 4 de enero de 2023

Ser como niños 2023

Cierro los ojos, concentrándome para retroceder en el tiempo. Y estoy allí, frente a las caras iluminadas de mis hermanos, que nerviosos, no pueden dejar de sonreír. Yo también sonrío, y con miedo y en pijama, vamos todos, los cinco juntitos por el pasillo, por aquello de que ir en grupo te hace sentir más fuerte; mientras, nuestros padres intentan dormitar en la cama. Y con el frío de la madrugada, en la sala de estar, nos esperan nuestros regalos. Pero nuestros ojos brillan no sólo por los presentes recibidos, sino porque tres seres mágicos han estado en casa, se han comido las galletas y tomado la leche, y hasta los camellos han saboreado la hierba que les habíamos preparado. Y es que en Navidad, pero sobretodo en Reyes, los niños creen con más fuerza que nunca en la magia, y los adultos soñamos de nuevo con ser niños, y me gusta pensar que recuperamos en cierta medida la ilusión perdida, pues nos contagia el ambiente cargado de espejismos y fantasía.

 

  • Mamá, mamá, ¿podré subir hasta las nubes, tumbarme encima y flotar?

  • Y entonces mamá sonriendo, le dibuja un globo con el que podrá cumplir su deseo.

  • Papá, papá, quiero encontrar un tesoro olvidado.

  • Y entonces papá muy concentrado, le dibuja un submarino con el que podrá descubrir las riquezas del fondo marino.

  • Abuelo ¿Podré algún día ser una heroína?

  • Y entonces el abuelo, la dibuja con capa y un corazón grande y rojo sobre el pecho.

  • Mamá, papá, quiero llegar hasta el fin del mundo.

  • Y mamá le dibuja un cohete con el que viajar lejos, y papá de fondo, le dibuja el universo.


     
    Y la niña se va a la cama cada noche abrazando su libreta de dibujos. Y algunas noches sueña, que se cumplen sus deseos.

 

Felices Reyes para tod@s y que el 2023 nos traiga salud y paz, que del resto deberá encargarse cada cual. Abrazos.